El concepto de salud holística nos enseña a tratar al cuerpo como un todo. La palabra holos, proveniente del griego, se puede traducir como «integral». Tanto el cuerpo como la mente son partes importantes. La salud física y mental/emocional es una balanza que debe estar perfectamente equilibrada si buscamos un estado de salud óptimo.
Por tanto, podemos decir que para una buena salud física, además del cuerpo, debemos trabajar nuestra mente. Algunas disciplinas tan antiguas como el Yoga, llevan siglos trabajando sobre la relación entre la salud física y la emocional.
Actualmente tenemos mil formas de trabajar nuestra mente. Una de ellas es mediante la psicología para adultos. Algunos mitos acerca de los psicólogos nos crean reticencias a la hora de recibir una sesión de terapia. ¿Por qué no mejorar nuestra salud mental para mejorar también nuestra saluf física?
¿Cómo puede mejorar la salud general y física un psicólogo?
Volviendo al Yoga, esta disciplina no ayuda a liberar la mente mediante una serie de ejercicios físicos (asanas). Una forma de liberar la mente es trabajando el cuerpo, y viceversa. El trabajo de la mente nos ayudará también a sanar y liberar el cuerpo.
Por tanto, entendemos que el camino correcto hacia la salud integral y completa es la búsqueda de la salud física en combinación con una buena salud mental. Todo esto nos lleva directamente a la famosa afirmación en latín: Mens sāna in corpore sānō (mente sana en cuerpo sano).
La mayoría de las contracturas y problemas de espalda tienen raices y orígenes emocionales. Los posibles bloqueos, problemas y barreras creadas en nuestra mente, el estrés diario, o una mala racha pueden ser una fuente de problemas físicos. Estos problemas pueden mejorar mediante ejercicios o masajes, pero si la raiz es de tipo emocional o mental, volverán a aparecer una y otra vez. Una forma de liberar este tipo de contracturas y problemas creados por el estrés o la ansiedad, es mediante una visita al psicólogo.
La salud mental es tan o más importante que la física, y ambas están estrechamente unidas.
Visitar a un psicólogo aunque no se necesite terapia
¿Por qué visitar a un psicólogo no necesitando terapia? Porque siempre se puede mejorar. Un ejemplo puede ser una visita a un fisioterapéuta cuando no tenemos ninguna patología. Acudimos para mejorar el rendimiento deportivo. Con la salud mental ocurre algo similar, una visita a un psicólogo nos ayudará a sanar emocional y físicamente.
De la misma forma que acudimos a un entrenador personal para mejorar nuestros entrenamientos aunque no tengamos ninguna patología física, podemos acudir a un psicólogo con el objetivo de mejorar a nivel personal. Los psicólogos nos pueden ayudar a conseguir nuestros objetivos a nivel personal y también a afrontar problemas tan cotidianos como el estrés. La liberación del estrés, por ejemplo, hará que físicamente rindamos más, por lo que estaremos menos fatigados y más centrados durante los entrenamientos.
La salud emocional influye directamente sobre la salud física. Es importante tratar los problemas de raiz emocional, para mejorar y sanar físicamtente.
